Pico del Lobo Sur - 22 Febrero 2009

Clasificación MIDE

Valoración del MEDIO
-Eventualidad de que una caída de un excursionista sobre el propio itinerario le provoque una caída al vacío o un deslizamiento por la pendiente
-Paso probable por neveros o glaciares, independientemente de su inclinación
-Alta probabilidad de que por la noche la temperatura descienda de 5º C y la humedad relativa supere el 90
-Paso por lugares alejados a más de 3 horas de marcha (horario MIDE) de un lugar habitado, un teléfono de socorro o una carretera abierta
-La diferencia entre la duración del día (en la época considerada) y el horario del recorrido es menor de 3 horas
-En algún tramo del recorrido, una eventual disminución de la visibilidad por fenómenos atmosféricos (que no se juzguen infrecuentes) aumentaría considerablemente la dificultad de orientación
Orientación en el ITINERARIO
-Aunque el itinerario se desarrolla por trazas de sendero, líneas marcadas por accidentes geográficos (ríos, fondos de los valles, cornisas, crestas...) o marcas de paso de otras personas, la elección del itinerario adecuado depende del reconocimiento de los accidentes geográficos y de los puntos cardinales.
Dificultad en el DESPLAZAMIENTO
-Marcha por sendas con gradas o escalones irregulares de distinto tamaño, altura, rugosidad e inclinación. Marcha fuera de senda por terrenos irregulares. Cruces de caos de piedras. Marcha por pedreras inestables.
Cantidad de ESFUERZO
-Hora salida: 08:09:40
-Hora llegada: 19:07:38
-Duración incluida paradas: 10:57:58
-Distancia: 20,44 km
-Altitud máxima: 2124 m
-Ascensión acumulada: 1358 m
-Máxima pendiente: 35,34%
-Mínima pendiente: -34,72%
-Velocidad media: 1,8 km/h (incluidas paradas)
-Máxima pendiente con nieve: 35,34%
-Mínima pendiente con nieve: -34,72%
Dificultades Técnicas Específicas
-Nieve:
Piornal cubierto de una capa de nieve derretida a su alrededor, muy difícil avanzar al hundirse constantemente, a partir de 2000m nieve algo más dura.
Resumen de la ruta por QuiQue
Cramponeros: David PK y Quique

Tercer objetivo que no podemos cumplir en este invierno. Es cierto que en cada ocasión ha sido por una causa diferente. En el Reajo Alto una tormenta amenazante que de hecho nos pilló pero ya por las zonas bajas. En Abantos una capa de nieve, que hacía mucho tiempo no se veía en esa zona, hacía imposible avanzar incluso a gente que iba equipada con raquetas. Y en esta ocasión la dureza de la ruta junto con unas condiciones, más que adversas, perversas del terreno nos obligaron a dar la vuelta en el punto de no retorno.

A las 05:50 estaba pegándole un toque a David en el telefonillo y el caso es que no tardó nada en bajar, supongo que ya estaba preparado aunque habíamos quedado a las 06:00. Al salir de Leganés directamente ganábamos un tiempo que de antemano sabíamos que íbamos a necesitar. La ruta completa son unos 24 km y casi 1500 m de acumulado y a pesar de que el desnivel máximo no es muy pronunciado las subidas y bajadas son constantes, rompe piernas total. Además Bocígano no está precisamente a la vuelta de la esquina así que a las 08:10h (como siempre) empezamos a andar, hacia el Noroeste, buscando el primer repecho que se encuentra justo a las afueras del pueblo. Una vez superado el primer kilómetro y 100m de ascensión con las piernas frías hay una ligera bajada y en seguida nos encontrábamos buscando la cuerda de la Loma del Picaño. Al principio hay una subida plagada de piornos donde se ascienden unos 400m en 2 km, es sencilla aunque se hace muy larga. Casi en la cumbre decidimos parar a almorzar, ya eran cerca de las 11:00 y los estómagos empezaban a pedir su rancho y eso hay que respetarlo.

La parada duró poco más de media hora, todavía nos quedaba mucho trecho. La verdad es que yo me esperaba más nieve pero por el momento la poca que encontramos era muy mala para andar. Al haber tanto piorno, en las zonas de nevero, se encontraban tapados por la nieve y por el calor que desprende el propio piorno, va derritiendo la nieve más cercana a él, es el mismo efecto que ocurre con las rocas cuando les da el sol. Avanzar así es dificilísimo, das un paso y te hundes, el siguiente paso te queda alto subes y ¡plaf! te hundes de nuevo; ahora consigues dar tres arriba, pisando huevos claro, ¡plaf! te hundes otras tres veces. Y por supuesto el consiguiente peligro que se te cuele el pie de atrás cuando ya tienes avanzado el de delante y se te quede literalmente clavado pudiendo llegar a producir lesiones importantes. Esta situación se fue pronunciando según íbamos avanzando durante toda la Loma del Picaño así que superarla y llegar hasta los pies del Cerrón nos costó un verdadero esfuerzo.

Ya en el Collado de Ortigosa decidimos avanzar a media ladera y evitar la cumbre para ahorrar esfuerzo; aquí la nieve estaba algo más dura y con los crampones se avanzaba bastante bien, algún "hundimiento" pero no tan constante. Llegamos a un collado que en el mapa está marcado como Canchos Buenos y para nosotros era el punto de no retorno: llevábamos andando 6 horas y no habíamos hecho más que 10 km; hasta el Pico del Lobo faltaban aproximadamente unos 2 km más 12km hasta el pueblo; la zona del piornal/nieve nos había castigado bastante; anochece a las 19:00 y hasta Madrid en coche hay un ratito. Así que con todo el dolor de nuestro corazón no nos quedó más remedio que volver por donde habíamos venido, las cuentas no salían, si regresábamos muy mal se tendría que dar para tardar más de las 6 horas que nos había llevado la ida, pero si continuábamos nos arriesgábamos a un camino desconocido y 4 kilómetros más que la primera alternativa. En estos casos hay que ser pragmáticos pero... hay que buscar una fecha para volver ¡ya!.

Para el regreso optamos por bordear de nuevo el Cerrón, en esta ocasión por su ladera Oeste aprovechando unas terrazas que tienen toda la pinta de haber sido talladas por la mano humana. Cuando llegamos de nuevo al Collado de Ortigosa hicimos un nuevo descanso, avituallamiento y aprovechamos para quitarnos los crampones, con el sol del día la capa superior de la nieve estaba convirtiéndose en paposa y ya estaba claro que no iban a ser necesarios. Ya sabíamos lo que nos esperaba, o eso creíamos. A las 16:00h, después de una media hora de parada nos lanzamos a por nuestro próximo destino: la Loma del Picaño. Durante la parada la estuvimos estudiando y la verdad es que nos engañamos a nosotros mismos. Creíamos que estábamos más abajo, es decir, más cerca del collado pero en realidad tuvimos que descender bastante, con lo cual la subida fue mayor de lo que preveíamos. Las condiciones de la nieve lógicamente iguales a la ida, hundirse, hundirse y más hundirse. La bajada de esta loma larga y pesada, sobre todo para unas piernas ya cansadas, de hecho nos asombró al descender lo poco que nos había costado por la mañana subirla, claro que en ese momento nos encontrábamos al principio de la ruta y no sabíamos la que nos íbamos a encontrar con la nieve.

Así y todo no se nos dio mal, tardamos 3 horas en recorrer los últimos casi 7,5km y a las 19:07h nos encontrábamos en el coche buscando al "regente" del único bar de Bocígano que, parece ser, abren a demanda. Un par de cervecitas reponedoras y a Madrid esperando no encontrar mucho jaleo a la entrada. Un buen día, con mucha dureza, sufrimiento y pena por haber tenido que renunciar a coronar El Lobo, aunque como siempre ocurre, nos quedamos con el recuerdo de haber pasado otra buena experiencia en la montaña, con muy buen rollo, estupendos paisajes y por supuesto la ganas de volver.

MAPA

VIDEO DE LA RUTA POR DAVID PK